las cosas de siempre

saliendo del bar, pensando en las cosas que uno siempre piensa cuando toma cerveza, ella ella y mas ella y al siguiente ella y mas ella, es inevitable que todo me la recuerde, estaba en el lugar en el que la conocí, luego la película, después de esperar unos ocho meses, luego de saber que existía por puro azar, un azar hasta gracioso, un boletín que no volvió a llegar me anuncio que una canción de cierta banda haría parte de la banda sonora, así me di cuenta que Smashing Pumpkins haría una canción para Watchmen y en el transcurso del tiempo me vi mas atraído por ella mas sumergido en este amor extraño, este sentimiento que me hace escribir y al mismo tiempo buscaba información de la película, miraba vídeos, imágenes y me sentía mas intrigado por verla y mas envuelto en ese juego, luego de todo, de todas las cosas de todos esos demonios que danzan en mis escritos, todas esas neuronas que danzan en mi mente y esa orgía de mariposas en mi estomago llego el tiempo para verla, ahora tranquilo pero extrañando todos esos detalles raros, esos juegos tontos, ese lenguaje mas allá de lo entendible en el que hablaba con ella. una espera ridícula al lado del tiempo que había esperado, conversaciones que se habían de tener, conclusiones obvias, nada que no se supiera de antemano, nada que remediara nada, una nada que me invadía un vacío en el pecho que me recuerda que hace poco había algo ahí, habitándolo, alimentándose de esperanzas (esas que tanto odio) de ilusiones y sueños, un algo que devoro mi mente y luego mi corazón, un algo que simplemente desapareció pero dejo un pequeño huequito, una concha vacía en mi alma, luego entrar a ver la película, con mil ideas en mi mente ideas de todo tipo, ideas que se vieron aplastadas por el torrente de ideas que me invadieron, la cantidad de reflexiones y recuerdos que llegaron a mi mente mil momentos en los que no supe si llorar o maldecir la genialidad de la película, lo absurdo de las cosas, una secuencia de sucesos y eventos que me llevaron ahí, cosas que aleatorias pero que con un orden digno tan solo del caos natural en el mundo me tenía ahí viendo algo simplemente genial, me hacia pensar, me hacia recordar, fue un largo camino hasta aquí, desde los días de la atalaya hasta los días de la inconsciencia, cuando mi racionalidad se ahogaba en alcohol y solo quedaba el instinto, la irracionalidad lo único que siempre queda cuando todo lo demás se ha ido, lo que nos mantiene vivos sorteando obstáculos. ese instinto animal, destructivo que nos caracteriza como humanos, que nos corrompe que nos envuelve en un manto de inmensa morbosidad que solo se puede controlar mediante esto:

"solo se pueden domeñar almas salvajes mediante cuentos de buenos y malos, historias de ángeles y demonios, un error inducido que los aparte de la injusticia y la barbaridad"

es ese control de creencias que nos intentan imponer y que algunos podemos evitar y salir a la verdad (no a la luz, la verdad no es bonita casi nunca, es mas la verdad puede ser negra porque casi nunca la vemos) una verdad que nos deja ver el mundo con otros ojos una verdad que nos muestra la aberración irracional de las creencias, lo absurdo de las decisiones debidas a las creencias, pero es una verdad relativa e individualizada, es una verdad que depende de cada uno de nosotros como un nirvana mortal.