listo, lo encontré dentro de todo ese orden sin orden que llamo cajón, cuando saque ese cuaderno, rayo que se convirtió en escalofrió por mi espalda y todos esos mil recuerdos de ella vinieron a mi mente, esos jugueteos, y tantas cosas que pasaron en el curso, vinieron a mi mientras cerraba la puerta, veía los dibujos que ella había hecho ahí y subía las escaleras buscando el pc para escribir un gran -suspiro- lleno de energía zen recorre la habitación, buscar las ultimas paginas sin antes no mirar casi todo el cuaderno y recordar tantas cosas que pasaron...
vi la sangre brotar de mi interior y
pasar por mi boca como el mal
dentro de cada uno de nosotros, como
las palabras hirientes que salpican a
cada persona a nuestro alrededor
fue un momento casi místico, traído por
el precio de las decisiones,
el dolor dentro de mi, el malestar en mi mente
y la mezcla de alimentos, alcohol,
lagrimas, suspiros ideas sentimientos agitándose,
un catalizador, la irracionalidad de las
decisiones, el no poder entenderlas a tiempo
un resultado, ver como de las profundidades
de mi ser venia aquella mezcla, quemando mis
entrañas, destrozando mi mente, desgarrando mi
cuerpo y saliendo por mi boca de
una forma incontenible, enrojeciendoce cada
ves mas, de pronto vergonzosa del daño que me hacia,
pero cada vez mas y mas roja hasta que
de pronto vi venir de mis entrañas la sangre
que tantas veces describí, yo estaba botando
sangre por mi boca, era casi un demonio incontenible
saliendo de mis entrañas, asustándome.
pero no aterrandome,
no sentí miedo,
sentí sangre rara en mi
boca, como si saliera con
algo mas, posiblemente con
mi alma ensangrentada
con mis ideas mis acciones y respire
una vez mas ante e pozo de mi sangre y
ahí, justo ahí mis ojos se nublaron, mi
mente se extinguió y caí sin aliento, irremediablemente
muerto, irremediablemente
racional e irremediablemente humano.
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